Almassora retira las 22 cámaras de seguridad de los colegios públicos.

El consistorio sustituye las alarmas por otras sin captación de imagen Dos padres denunciaron la instalación de los dispositivos. El Ayuntamiento de Almassora ha comenzado a retirar los dispositivos de grabación de los centros públicos educativos tras las denuncias de dos padres de los colegios Hermanos Ochando y Embajador Enrique Beltrán. La primera denuncia se produjo a mediados de marzo, pero la polémica surgida tras la publicación aceleró el pasado viernes la eliminación de las cámaras.  Los responsables de la empresa de seguridad privada se desplazaron hasta el centro Embajador Beltrán en la tarde del viernes, minutos después de las cinco, para desactivar las alarmas con cámara que precipitaron la primera denuncia ante la Guardia Civil y la Agencia Española de Protección de Datos.  Según comunicaron los técnicos a las madres que acudieron a recoger a sus hijos, la empresa recibió una orden municipal para retirar los 22 dispositivos, siempre según estas fuentes, del interior de los colegios. Dado que fue el progenitor de un alumno de este centro el que presentó la primera denuncia cuando se percató de las cámaras al ir a cambiar a su hijo en la fiesta de Carnaval, los técnicos priorizaron la retirada de los equipos de este colegio. El resto de centros optó por bajar la carcasa que envuelve la óptica de grabación a la espera de que la empresa también desinstale el sistema a partir de la próxima semana.  «Para que nadie se moleste» Según el alcalde, Vicente Casanova, el ayuntamiento pidió un informe a la empresa, «de reconocido prestigio y solvencia». El documento, según el primer edil, «confirma la homologación y confidencialidad de su sistema, que efectivamente solo dispara cinco fotos en ráfaga cuando se activa (fuera del horario lectivo) en caso de detectar un intruso, para poder esclarecer lo ocurrido».  El alcalde Casanova ratificó que el acceso a las imágenes es competencia de los cuerpos de seguridad del Estado en caso de necesitar su visionado. «No obstante lo anterior, y para que ningún padre pueda sentirse molesto, hemos dado orden a la empresa de que sustituya este sistema en el interior de las aulas de todos los colegios por dispositivos sin captación de imágenes», indicó Casanova.  La primera de las denuncias ante la Guardia Civil tiene fecha del 12 de marzo. La repercusión de la publicación de los hechos, el pasado 30 de abril, motivó la instalación inmediata de un cartel en la fachada exterior del colegio Embajador Beltrán para alertar de la grabación. «El cartel no se ajusta a derecho», mantiene el afectado en la ampliación de la denuncia que cursó el 1 de mayo.  Según el parte oficial, considera una «burla» su instalación. Un día después la empresa comenzó a retirar las cámaras de los centros educativos. Las denuncias se mantienen «por un posible incumplimiento de la Ley 15/1999 de Protección de Datos de carácter temporal. (Fuente: levante-emv)